He vuelto a abrir el cajón de sentimientos, ese que dejé de lado, por miedo quizás... No, por miedo no, por estar cansada de dar y no recibir, por decepcionarme cada día. Jamás entenderé como las personas no valoran lo que tienen, o simplemente saber mantenerlas a su lado. Jamás entenderé como algo tan malo, podía hacerme tanto bien, quizás era mi ilusión por mantenerte cerca.

Quizás he vuelto a abrir el cajón para darme cuenta que no me mereces, que tus promesas eran falsas, que tus juegos conmigo no van, y en el caso de jugar, tendrías las de perder, ya que nunca encontrarás alguien que lo haya dado todo por ti como lo he dado yo. Hace dias que pensé que volviendo lo malo, lo bueno también volvería de vuelta. No, no quiero ni que vuelvas, ni que vuelva la forma en la que me hacías feliz haciéndome daño. Tan sólo quiero que pase el tiempo, porque sé que pone a cada cual en su sitio, y tú, tú tendrás tiempo para arrepentirte de este mal.

Cambios.

Cambios, a nadie le gustan los cambios, pero día a día nos sometemos a muchos de ellos. Hace ya casi un año que no escribo, que no me desahogo, porque era felizmente feliz, se podía decir que tocaba el cielo con las manos, pero el problema son los cambios, siempre estan ahí, para joder, o tal vez para mejorar. Recuerdo el día que me dijo adiós, ese adiós que me hizo un boquete tan profundo en mi estomago, ese que hizo que se escaparan todas esas mariposas que sentía dentro de mi... Un adiós que no entenderé. Seamos realistas, tú tampoco sabes porqué dijiste ese adiós, porqué escapaste, porqué te fuiste sin a penas razones...
Casi tres meses han pasado y sigo teniendo el mismo vacío en mi interior, ese hueco que sólo tu podrías llenar. Sabes? He intentado rellenarlo, o simplemente hacerlo desaparecer, pero no hay forma. Casi inevitable, como quererte.
Te echo de menos, echo de menos tu risa, tu voz, tus abrazos, esos que me daban calor, echo de menos tu presencia. Lo que más echo de menos es la felicidad que sentia gracias a ti.
No sé si te acuerdas de mi, tanto como yo de ti para empezar a escribir de nuevo, para tener una razón por la cual abrir de nuevo mi blog, este que tiene tantísimos recuerdos que evitó abrir entradas antiguas. Sólo espero que estés bien, que hayas encontrado tu sitio en este mundo de mierda, al cual, aún no me he adaptado. Prometo acordarme de ti cada catorce, acordarme de tu risa mañanera, esa que tanto echo de menos. Prometo estar ahí siempre, porque yo, contigo me quedaría.

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Todo el mundo piensa que las personas pueden cambiar, que el tiempo pone a cada uno en su lugar, que el amor viene y va, y los sueños no siempre se hacen realidad. Yo prefiero no pensar en nada de estas cosas, prefiero que los momentos surjan, que yo decida quien se queda en mi vida y quien se tiene que ir. Odio que me mientan, que me traicionen, y lo peor de todo que me decepcionen. Una persona que decepciona a otra, es por que sinceramente no le importa mucho la persona a la cual está decepcionando. Hubo un tiempo en que pensé que todo iba a ser maravilloso, que todo el mundo se merece una segunda oportunidad, y que tal vez, las personas sí saben cambiar y sobre todo pueden. Pero ¿ y si me estoy equivocando ?


Estoy harta de desilusionarme, de darlo todo y encontrarme con la mierda de rutina que cada día tengo en mi vida, de que las personas me decepcionen, de que otras tantas se olviden de mi, o simplemente hagan vacío. Estoy harta de tener que poner buena cara para que no me pregunten que me pasa, o simplemente ponerla para que no les molesten mi cara larga. He cambiado mi rutina, he conocido a personas maravillosas que antes las veía por la calle y ni siquiera saludaba, y ahora estoy muy feliz de poderlas tener a mi lado.


Siempre caigo en la misma piedra contigo, siempre en la misma mierda la cual nunca desaparece de mi vida. Sabes? hasta he pensado que para que esta mierda desaparezca, tendrías que desaparecer tú, pero no puedo, me supera... Pensar en ti es ver tantos momentos maravillosos, tantos recuerdos, y tantas cosas que hacemos juntos, creo que no puedo separarme de ti, y que aunque algún día que otro quiera, créeme que jamás lo haría. 
Estos días sin ti he estado pensando mucho sobre nosotros. Los primeros días tenía miedo, miedo a que de nuevo pasáramos por lo que pasamos una vez, y me entraba pánico, los tres siguientes empezaron las peleas, muy cómicas, a veces no te soportaba, incluso te decía que no me amargaras... Hasta que llegó el día de la decepción. Te juro que no me había sentido tan mal por dentro como ese día, pero ¿ cómo se te puede ir tanto la cabeza ? sobre todo conmigo, que lo doy todo por ti, todo, y tu en cambio decepciones. Yo sé que te he fallado más de una vez, pero con lo que juegas algún día te puedes quemar, y sobre todo perderme.


Sí y también puedo decir que me siento perfectamente bien conmigo misma, que todo lo que hago pienso que está muy bien, que disfruto, tengo tiempo para ti, para las niñas, para mi familia, que me lo paso muy bien en mi casa, con mis amigas, contigo, pero sobre todo que ahora sí que estoy feliz de ser como soy y que a mi esta felicidad que tengo no me la va a quitar nada ni nadie, y que a base de palos he aprendido, que rectificar también es de sabio pero que se puede llegar tarde, y pienso que ha llegado mi momento de felicidad, contigo, pero también con las mías. 
Creo que tengo que darte las gracias, gracias por abrirme los ojos, por que pensaba que solo estabas tú, pero hay muchas personas que me quieren, y también hay que valorarlo. 
Gracias a ti, por cuidarme como hasta ahora lo estas haciendo, por darme tus mejores días, tus mejores años, tus mejores momentos, sobre todo por querer ser mi compañero en este camino, me haces mucha falta sinceramente, pero te pido una sola cosa; no me falles.

okkkkkkkkkkkk

Es difícil asumir que las personas cambian con el tiempo, y que los amigos pueden convertirse en grandes desconocidos. No entiendo como la gente puede ser así. Y que si a alguien le hace falta un apoyo, pienso que deben estar ahí las personas que de verdad importan, pero eso es cosa pasada. Ahora cada uno va a su rollo, a lo que realmente le conviene, pero bah !
Mejor que cada uno viva su vida, que cuando realmente haga falta, a lo mejor no tengo ganas de estar.